El Mundo

RD con los suelos saturados inicia temporada de huracanes

Mercedes Irma Mejia 

La práctica de nombrar a las tormentas tropicales, huracanes, y tifones comenzó hace años para ayudar a una rápida identificación en los avisos de precaución a la población. Esto se debe, según los expertos, a que es más fácil recordar el nombre de una persona que un número o términos técnicos. De acuerdo con la Organización Meteorológica Internacional, «establecer nombres para los fenómenos atmosféricos es más fácil para los medios de comunicación a la hora de publicar noticias acerca de ellos».18765763_10154806977219895_994163465946643934_n

La experiencia dice que es mucho más efectivo el uso de nombres cortos ya que induce menos a error que la identificación con la latitud y longitud del fenómeno en cuestión. Estas ventajas son especialmente importantes en el intercambio de información sobre la tormenta detallada entre cientos de estaciones dispersas, bases costeras y buques en el mar.

Mantengan la lista a mano…la van a necesitar

Wellington Pérez

Egresado como periodista de la Escuela de comunicación de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD). Cuatriboliao, Minoso y más Cabraleño que una Cachua o una Viejaca.

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