Mercedes Irma Mejia
La Organización Meteorológica Mundial (OMM) anticipó el pasado jueves que en los próximos meses se puede registrar un fenómeno de La Niña de “débil” intensidad, que podría alterar el tiempo en distintas partes del mundo.
La OMM estimó entre un 50 y un 55% las probabilidades de que La Niña aparezca en el último trimestre del año, y que las condiciones climáticas vuelvan a la normalidad en el primer trimestre de 2018.
Entre las consecuencias por La Niña tenemos:
-Aumenta la frecuencia de las tormentas tropicales y de los huracanes en el Atlántico Norte.
-Las nevadas podrían ser históricas en algunas partes de los EE.UU.
– Sequías importantes en el oeste de América, en el Golfo de México y en el noreste de África. La temperatura en estos lugares podría ser algo más baja de lo habitual.
– En el caso de España y de Europa en general, las precipitaciones podrían aumentar significativamente.
Para que ocurra La Niña, el enfriamiento del mar debe coincidir con una variación anormal en la atmósfera. (NOAA)
